¿Dónde te deje, mariposa? ¿Dónde?
Hace mucho tiempo besé tus lunares, y me sentí como tú:
Una ninfa envuelta en seda y arcoiris... Una hada.
¿Dónde escondes tu miel, mariposa? ¿Dónde?
Aquella que anhelan los mortales, con la que evitas el dolor.
¿Cuántas almas has convertido con sutileza, en tus amantes?
¿Quién te atrapó después?
Escabullida en redes oscuras... Incluso así, no se pierde tu brillo.
Mariposa ángel, mariposa del otro lado del universo.
Inspírame una vez más como un cuento infinito;
Que yo aquí, te escribiré todos los versos más deliciosos como tu veneno.
Mariposa invisible, aún te siento...
En mis dedos...
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