Payaso

No, no llores, payaso
No te refugies ahora en este templo de impurezas,
Extiende tus anaranjados cabellos secos por el sol diablo,
que tus futuras lágrimas se difuminen en la brisa de la muerta fe,
que tus ojos cubiertos de burlas se opaquen entre el pasto negro, negrísimo.
Yo conozco tu fúnebre sonrisa, pero ahora sólo debes seguir
Muéstrale a ese público que son manipulados,
Haz que rían tanto que mueran todos a la vez,
Abastécelos de muecas con peste,
Retuércelos del dolor, ¡Dolor!
Llena sus bocas blancas del más profundo negro,
Y ríe. Ríe. Ríe. Continúa Riendo. Payaso malo,
Ahora comprendes lo bueno de la vida.

Dedicado a Alfredo Figueroa, por su aliento constante y su amistad :)